Botox para Patas de Gallo.
Las “patas de gallo” son esas pequeñas arrugas radiales que aparecen en la zona lateral exterior de los ojos, finas y suaves al principio, pero que con el paso de los años se vuelven muy profundas y marcadas.
Las patas de gallo no son un problema de salud pero sí que causan problemas estéticos.
Normalmente las patas de gallo se marcan más a partir de los 35 años, incluso con la cara en reposo, y se hacen más evidentes.
Las arrugas de las patas de gallo se deben en su mayor parte a la contracción de las fibras del músculo orbicular de los ojos, cuya función principal es la de cerrar los párpados.
Cómo se realiza el tratamiento de botox para patas de gallo.
Se inyectará la toxina en la zona más periférica y lateral, y el paciente deberá de forzar la aparición de las arrugas fingiendo una sonrisa forzada, para poder localizar mejor las zonas concretas para una correcta infiltración.
Las propiedades de la toxina botulínica anulan la capacidad de movimiento del músculo, lo que evita que pueda tensarse, con lo que las arrugas que se generan en la frente, el entrecejo o las patas de gallo no son visibles. Elimina las arrugas de expresión producidas por la acción del músculo orbicular del ojo, suavizando la expresión sin llegar a perderla.
El tratamiento con bótox correctamente en el tercio superior del rostro, realizado por un médico con experiencia y toxina botulínica de calidad, permite mantener un rostro con aspecto expresivo, luminoso y natural.
Puede combinarse con una blefaroplastia para mejorar los resultados de la operación de párpados.
Cuánto dura el botox en las patas de gallo.
El efecto del botox, en el tratamiento de arrugas faciales, comienza a notarse a los 6-7 días de la sesión y dicho efecto, tras la primera sesión, dura entre 4-6 meses. La duración de los resultados dependerá de las características de cada paciente.
Cuándo hacerse un tratamiento de botox contra las arrugas
Si el paciente comienza su tratamiento de botox como prevención para la aparición de arrugas, en lugar de corregir las patas de gallo, necesitará menos cantidad de inyecciones y conseguirá un resultado más natural. Y, lo que es más importante, va a retrasar la aparición de arrugas en el rostro.
Otros tratamientos con botox: